Mantequilla y especialidades

La mantequilla se obtiene de la nata de leche pasteurizada a través de procesos de emulsión. Siendo la más popular la de leche de vaca, también se encuentran en otros orígenes. El contenido de grasa habitual se sitúa en el 82%. Según el proceso de fabricación se clasifican en los siguientes tipos: según pH (dulce o ácida), pudiendo añadir extra de sal o no (con sal y sin sal). Los procesos de texturización proporcionan una mejor consistencia para usos más concretos (hojaldres, etc).
Disponible en diferentes calidades: dulce (con o sin sal), ácida sin sal, texturizada, etc.

La mantequilla de suero se obtiene del batido de la nata de suero (procedente de la fabricación de queso). Es una grasa alternativa, de textura untuosa, utilizada como ingrediente en la industria alimentaria.

La grasa de leche anhidra (AMF) se elabora en base a los mismos ingredientes que la mantequilla tradicional. El contenido de grasa mínimo es del 99,6%. Se caracteriza por la casi total eliminación del agua en el proceso de elaboración, así como del extracto seco. Puede ser almacenada a temperatura ambiente para su conservación.